lunes, 23 de noviembre de 2009

Archivador convertido en repisa para teléfono y correspondencia





Pues sí, esta preciosa repisa donde descansa el teléfono inalámbrico y unas cuantas facturas es un simple y sencillo archivador de madera sin tratar que compré hace unos meses junto con alguna otra cosilla en Ikea. Se trata de un archivador KNUFF super económico. Tuve que cortarlo porque no me entraba en el rincón de la entrada de la cocina donde iba a colocarlo. Después de darle gueso a toda la pieza, le he dado un par de manos de pintura color tapioca. A continuación, he elegido unos pollitos y unas flores de una servilleta y los he pegado. Por último, le he dado tres manos de barniz al agua y éste ha sido el resultado. Me encanta cómo ha quedado y los motivos son muy alegres y simpáticos. Con un simple archivador he matado dos pájaros de un tiro: ya no tengo el teléfono por el suelo y, por otro, tengo un lugar donde poner las cartas del banco hasta que les llega a hora ser archivadas.